En la zona romántica de Vallarta, sobre un restaurante existente, se encuentra Terco, un bar de vinilos japonés que invita a sus visitantes a descubrir un rincón de calma y sofisticación. Inspirado en los legendarios speakeasys, este espacio combina la tradición japonesa con un aire de misterio y exclusividad.

Los speakeasys surgieron en Estados Unidos durante la prohibición en los años 1920, cuando la venta de alcohol era ilegal. Estos bares clandestinos eran lugares secretos donde las personas se reunían para disfrutar de bebidas y música en un ambiente íntimo y oculto. Terco rinde homenaje a esta era dorada de clandestinidad y estilo, creando una experiencia única que evoca el mismo sentido de exclusividad y descubrimiento.

El diseño del bar ha sido meticulosamente pensado para evocar la atmósfera de una barra japonesa tradicional, utilizando una paleta de materiales cuidadosamente seleccionados. Maderas naturales de tonos cálidos y piedras elegidas con precisión configuran un espacio donde la calidez y la autenticidad son palpables. Las maderas aportan una sensación acogedora y orgánica, mientras que las piedras brindan una sensación de solidez y permanencia.

En la concepción del espacio, se ha prestado especial atención a la iluminación, elemento crucial para crear la atmósfera deseada. Cada detalle lumínico ha sido estudiado para generar un ambiente acogedor y envolvente. La luz tenue, estratégicamente colocada, resalta las texturas de los muros y los detalles del mobiliario, creando un entorno que invita a la relajación y la contemplación.

El protagonismo indiscutible del bar lo tiene su colección de vinilos, cuidadosamente seleccionada para ofrecer una experiencia auditiva inigualable. Los visitantes pueden disfrutar de una amplia gama de géneros musicales mientras saborean bebidas especialmente preparadas, todo ello en un ambiente que respeta y celebra la tradición japonesa.